MISIÓN, VISIÓN Y VALORES

Misión
Somos una institución de Educación Superior líder que formamos integralmente profesionales técnicos con sólidos valores, éticos y sociales; lo cual les permitirá su desarrollo profesional y su inserción en el mercado laboral, siendo capaces de responder eficazmente a las demandas de una sociedad en constante transformación con responsabilidad social, ambiental y tecnológica contribuyendo al desarrollo individual, social, local, regional y nacional.
Visión
Al 2030 ser un instituto de Educación Superior Licenciado, con programas de estudios actualizados y acreditados acorde a las necesidad y exigencias del sector productivo, reconocida como un Instituto formador de profesionales técnicos idóneos, competitivos, con valores éticos comprometidos con la sociedad y el cuidado y protección del medio ambiente y que cuenta con personal docente y administrativo capacitado, utilizando herramientas informáticas, infraestructura y equipamiento pertinente.
Valores institucionales
Los valores, como base de la convivencia institucional, aportan una mejor calidad de vida. Los cauces por los que la vida cotidiana discurre están determinados por la jerarquía de valores. Estos ayudan a crecer y hacen posible el desarrollo armónico de todas las cualidades del personal, por lo que se debe potenciar aquellos que afectan la conducta, que configuran y modelan las ideas, los sentimientos y las actuaciones. En nuestra Institución, buscamos desarrollar prioritariamente los siguientes valores con las actitudes consensuadas por la comunidad educativa:
La entendemos como la capacidad de los estudiantes, educadores y sistemas educativos en general para enfrentar y superar los desafíos, adversidades y situaciones de estrés que puedan surgir en el proceso de aprendizaje, por lo que, para nuestra comunidad educativa, implica la capacidad de adaptarnos, recuperarnos y seguir adelante a pesar de las dificultades, manteniendo un enfoque positivo y constructivo en el proceso de aprendizaje.
La asumimos como la capacidad de los estudiantes, educadores y sistemas educativos para ajustarse a los cambios, situaciones nuevas y desafíos que se presentan en el entorno educativo. La adaptabilidad implica para nosotros la flexibilidad para cambiar de estrategias, métodos de enseñanza o enfoques pedagógicos según las necesidades y circunstancias específicas de los estudiantes y del contexto educativo. La adaptabilidad en la educación también implica la capacidad de aprender de las experiencias, de experimentar con nuevas ideas y enfoques, y de responder de manera efectiva a los desafíos y cambios que se presentan en el proceso de enseñanza y aprendizaje.
Para nuestra institución se refiere a garantizar la equidad, la igualdad de oportunidades y el respeto a los derechos de todos los miembros de la comunidad educativa. Implica asegurar que cada estudiante reciba una educación de calidad, independientemente de su origen socioeconómico, género, etnia, capacidades o cualquier otra característica personal. La justicia para nosotros también implica promover la inclusión, la diversidad y la no discriminación en el entorno educativo, así como garantizar que los recursos y las oportunidades estén distribuidos de manera equitativa entre todos los estudiantes. Además, la justicia en el ámbito educativo implica aplicar las normas y reglas de forma imparcial, el respeto a los derechos de los estudiantes y educadores, y la promoción de un clima institucional seguro, respetuoso y colaborativo. En resumen, la justicia en la educación busca garantizar que todos los estudiantes tengan las mismas oportunidades de aprendizaje y desarrollo, y que se respeten sus derechos y dignidad en el proceso educativo.
La honestidad en el ámbito educativo se refiere a la integridad, transparencia y sinceridad en todas las acciones, comunicaciones y relaciones dentro del entorno educativo. Implica que actuaremos con sinceridad, veracidad y ética en todas las interacciones relacionadas con la enseñanza, el aprendizaje y la convivencia en la comunidad educativa. Además, la honestidad en el ámbito educativo implica que hemos de ser transparentes en la comunicación con los estudiantes, colegas, padres y la comunidad en general, y actuar con integridad y coherencia en todas las decisiones y acciones relacionadas con la educación.
Buscaremos la colaboración, apoyo mutuo y compromiso con el bienestar y el desarrollo de todos los miembros de la comunidad educativa, así como la disposición a ayudar, compartir recursos, conocimientos y experiencias, y trabajar juntos para alcanzar objetivos comunes y promover el aprendizaje y la inclusión de todos los estudiantes. La solidaridad en la educación contribuye a crear un ambiente de respeto, confianza y cooperación en el que todos los miembros de la comunidad educativa se sientan valorados y apoyados en su proceso de aprendizaje y desarrollo.
La entendemos como la obligación, el compromiso y la ética profesional de los educadores, estudiantes y demás miembros de la comunidad educativa de cumplir con sus deberes y tareas de manera diligente, consciente y ética. Implica asumir las consecuencias de las propias acciones, decisiones y omisiones en el proceso de enseñanza y aprendizaje, así como actuar de manera proactiva para garantizar el bienestar y el desarrollo integral de todos los estudiantes. En ese sentido cumpliremos con los horarios, las normas y los reglamentos establecidos por la institución educativa, así como respetar los derechos y la dignidad de los demás miembros de la comunidad educativa.
La educación genera confianza,
la confianza genera esperanza y
la esperanza genera paz.